Cómo no procrastinar
Muchas veces nos abruma todo lo que tenemos pendiente por hacer en nuestro día a día, provocando que no sepamos por dónde empezar a poner orden y que vayamos posponiendo y dejando cosas sin hacer.
Y, ¿qué pasa al procrastinar? Que vienen los agobios y la frustración.
A pesar de intentar mantener un equilibrio entre el trabajo, vida social, gym, el blog, mis amigos y familia nunca tengo todo el tiempo que me gustaría para hacer todo lo que tengo que hacer, porque siendo sinceros, no existe la fórmula mágica para encontrar tiempo para todo o el equilibrio para todo. A pesar de eso, hay métodos que nos pueden ayudar a sacarle más provecho al tiempo cuando tenemos mucho que hacer.
– Haz una lista con todo.
En lugar de dejar que todo lo pendiente esté en tu cabeza sin orden de prioridades e intentando no olvidar nada, lo mejor es hacer una lista con todo: grandes proyectos, llamadas, citas, cosas pendientes por hacer, compra… Escribiendo todo lo que tienes en la cabeza conseguirás liberar tu mente y tener una visión global de todo lo que tienes que hacer. Esto te permitirá poder dedicarle energía a lo que realmente la necesita, pudiendo priorizar de más a menos importante.
– Desmenuza las tareas grandes.
Si tienes algún proyecto grande pendiente o una tarea importante, lo mejor es desmenuzar esa tarea en pequeñas tareas para ir haciendo cada cosa a su tiempo o momento. Si por ejemplo tienes pendiente escribir un post en tu blog, en lugar de apuntar como tarea principal pendiente:
. Escribir un post
Lo ideal sería:
. Hacer un brainstorming con ideas para un post.
. Boceto del contenido.
. Redactar el contenido.
. Buscar imágenes.
. Edición de imágenes…
Quizás así pueda dar la sensación de más agobio por ver más tareas pendientes, pero desmenuzando consigues esquematizar los pasos y las prioridades. Por no mencionar que vas tachando cosillas hechas antes.
– Saber en qué tienes que centrarte.
Después de hacer el listado con todo lo pendiente, debes implementar un orden de prioridades para saber qué es más importante. Además de determinar aproximadamente el tiempo que te llevarán. De esta forma podrás asignarlos a diferentes momentos de la semana en función del tiempo del que dispongas y de la necesidad de la tarea pendiente.
– Prioriza y combina tareas similares.
Volviendo al punto en el que tienes todas tus tareas apuntadas en una lista, debes ver si hay cosas que puedas delegar en alguien o cosas que una vez listadas te des cuenta de que no son necesarias. En ese caso, táchalas de la lista y una cosa menos.
A continuación analiza cuales son las 3 tareas más importantes de la lista. Quizás pienses, todo es importante, pero debemos priorizar para empezar por algo. También ayuda pensar qué cosas pueden hacerse en un mismo momento o se pueden agrupar en una misma tarea porque sean similares o parecidas. En ese caso lo mejor es combinarlas e intentar hacerlas en el mismo momento, matando dos pájaros de un tiro o tres 😉
– Agéndalo y ponte a trabajar.
Lo ideal buscar un momento para hacer las tareas cuando las tienes identificadas, es decir, agendarlas con día y hora. Es muy importante determinar si son tareas o trabajos mecánicos o más creativos para buscar el momento perfecto para desempeñarlos. No es lo mismo responder e-mails que escribir un post o ir a la compra.
Aunque tengáis la sensación de que estáis perdiendo el tiempo en organizar y planificar cuando podríais estar haciendo esas cosillas pendientes no olvidéis que obligaros a hacer eso es una herramienta de control y sobretodo de evitar procastinar día tras día.